28 de novembre del 2011

La "mala pata" de Linda

Hoy coneceremos a Linda, una caniche de 6 años de edad, que hace tres tuvo que ser operada para reparar una fractura de tíbia.

Un año más tarde, fué intervenida de nuevo para retirar la aguja que se le introdujo en el hueso en la primera cirugía.
Este año, Linda volvió al quirófano, pues se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla de la misma extremidad. La cirugía fué muy bien, pero pasado un mes, Linda todavía no acababa de apoyar bién la pata en el suelo y estaba perdiendo musculatura.

Así fué como empezó sus sesiones en el servicio de rehabilitación.

Cuando llegó, le costaba flexionar la rodilla izquierda y siempre dejaba la extremidad más abierta para descargarla de peso. En consecuencia, Linda presentava una diferencia muy evidente de masa muscular en una extremidad y en otra, así como diversas contracturas en el dorso.

El tratamiento que se le pautó consistió en una série de ejercicios activos, TENS, electroestimulación, masajes y movilizaciones de la articulación. De esta manera podríamos reeducar el caminar de Linda, aliviarle el dolor que padecía en la espalda, tonificar y aumentar la musculatura y recuperar la función de la extremidad.

Linda, aún siendo un poco miedosa, se adaptó muy bién a las sesiones y en seguida se empezaron a ver resultados. Ya no descargaba tanto peso de la extremidad afectada, flexionava mejor la rodilla y apoyava mucho mejor la extremidad en el suelo, a parte de recuperar la masa muscular perdida.

Pasadas 5 semanas, ya tiene el alta del servicio de rehabilitación aunque debe seguir realizando ciertos ejercicios en casa y venir de vez en cuando a revisión.

Enhorabuena Linda!